jueves, 27 de octubre de 2016

Por: Staff INSIGHT OK

Desde la antigüedad las mujeres de diversas culturas como la egipcia, romana, griega, entre otras, han utilizado la depilación como un método higiénico e indispensable para aumentar su belleza. Entre estas culturas existían diversos métodos de depilado, los cuales han sido modificados a lo largo de la historia.
Los egipcios utilizaban ceras hechas de azúcar, agua, limón, aceite y miel o con sicomoro, un árbol sagrado, savia y pepino. Los hombres utilizaban navajas de sílex, cobre y hierro, la obsesión de esta cultura por tener un cuerpo depilado, fue tan grande que llegaron hasta tal punto que una persona no podía entrar a un templo si no estaba depilado.
En Grecia consideraban a un cuerpo depilado como símbolo de belleza, juventud e inocencia, solo la clase alta se depilaba completamente. Las mujeres griegas utilizaban “ceras depilatorias” hechas de sangre animal, resinas, cenizas y minerales (derivados del cobre), y cremas depilatorias hechas de vinagre y tierra de Chipre. El primer grupo de barberos apareció en este lugar, estableciendo un salón a estilo de los actuales1,2,3.
Las mujeres romanas eliminaban el vello púbico desde la adolescencia, y en los baños públicos existía una zona exclusiva para depilarse, donde los esclavos, llamados alipilarius eran los encargados de hacerlo, usaban unas pinzas llamadas volsella. También utilizaban una sustancia denominada philotrum o dropax que sería semejante a las cremas depilatorias actuales, así como resina o brea y cera hecha de alquitrán. Los legionarios romanos implantaban el uso de piedra pómez para el afeitado.
Las mujeres judías formaban un triángulo con un hilo que la depiladora sostenía con los dientes y un extremo en cada mano. Al rotal sobre la piel, el hilo enredaba el vello y lo arrancaba de raíz1,3.
Para la Edad Media las mujeres siguieron depilándose, en algunos castillos había una habitación exclusiva para la depilación, también removían los cabellos de la parte alta de la frente y en distintos países europeos se implementaron métodos rápidos que incluían componentes cáusticos (que quemaban los pelos) como piedra caliza y caparazones. En los tiempos de la reina Elizabeth I. también se utilizaron navajas y pinzas, y algunas cremas de cal viva y arsénico para la zona de las cejas. En el lado del continentemente americano, en Argentina, los nativos llamados “frentones”, por los conquistadores españoles, solían eliminar todo el bello de la cara, incluidas pestañas y cejas, utilizaban unas pinzas o navajas que fabricaban con conchas de moluscos2,3.    
En el tiempo del siglo XV-XVII la depilación se continuó con vendas impregnadas de vinagre y aceite de nueces, para afeitar el nacimiento del cabello y para otras partes del cuerpo se inició el uso de hojas de afeitar.
La primera afeitadora se inventó en el siglo XVIII, la idea fue del barbero francés Jean Jacques Perret, y las mujeres utilizaban lejía cáustica para eliminar el pelo por completo.
Fue hasta 1903 que Gillet inventó la primera máquina con hojas intercambiables y para las mujeres se comienza a utilizar cera preparada a base de cera de abejas, resina y parafina. En 1930 la primera máquina de afeitar eléctrica por Jacob Schick y para las mujeres aparecen las cremas depilatorias que destruyen la queratina eliminando químicamente el vello, en 1940 Remington inventa la primera maquinita para mujeres, que ya se depilaban piernas y brazos por razones de moda2,3
Para 1960 Harold Maiman desarrolla y patenta el láser Ruby el primero en usarse en aplicaciones dermatológicas y estéticas, aunque su uso en la depilación fue hasta 1994. Aparecen las hojas de acero inoxidable. Finalmente, en 1980 las ceras depilatorias en caliente se plantearon como una de las principales alternativas de depilación femenina2,3.
Hoy en día los métodos de depilación láser son los más populares al comercializar depilación definitiva, seguido a estos están las ceras (Frías, tibias y calientes), cremas depilatorias, el uso de máquinas de afeitado y finalmente algo que no pasará de moda: las pinzas. Y tú, ¿Qué método usas? En nuestro próximo artículo hablaremos de ellos, sus ventajas y desventajas, síguenos en Facebook y Twitter.

Bibliografía.
1.       Equipo de redacción. (2016). Historia de la depilación. 2016, de Instituto clínico capilar y estético Sitio web: http://www.instituto-capilar.com/historia-de-la-depilacion
2.       Vazquez, L.. (2016). Historia de la depilación. 2016, de Imujer Sitio web: http://www.imujer.com/6985/historia-de-la-depilacion
3.       Batlle Edo, C. (2006, agosto). Depilación: métodos, productos y recomendaciones básicas. Dermofarmacia, OFFARM, 25, pp.46-50.